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| MADRID |
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| Los concejales no dan un paso atrás |
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| 'Caso Majadahonda'. Los ediles del PP ratifican sus denuncias ante la Fiscalía Anticorrupción, certifican presiones para frenar el concurso de las parcelas y dicen que De Foxá y el arquitecto de la empresa Afar-4 tienen relación en una empresa |
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| FERNANDO MAS José Luis Peñas y Juan José Moreno, concejales del PP de Majadahonda sobre los que pesa un expediente de expulsión, explicaron ayer durante más de cuatro horas y media en la Fiscalía Anticorrupción cómo, según su criterio, se intervino políticamente desde la dirección de su partido para cambiar el curso de la adjudicación de dos parcelas en este municipio.En su declaración ratificaron todos los extremos de las manifestaciones realizadas a lo largo de una entrevista concedida a M2, publicada el pasado 30 de mayo. Sobre todo, repitieron que Esperanza Aguirre, presidenta de la Comunidad y del PP regional, «presionó» a Guillermo Ortega, anterior alcalde, para que paralizara el concurso. El fiscal les pidió que le explicaran desde el inicio todo el camino de este concurso hasta la crisis de diciembre. Apenas se detuvo, en la venta de derechos de edificación por parte de Patrimonio Municipal de Majadahonda (Pammasa), caso que se dilucida en el juzgado número 3 de esta localidad. A Peñas le preguntó, en concreto, quién había elaborado el pliego de condiciones del concurso de la parcela RN-1. El concejal, entonces titular del área de Planificación Urbana le dijo que él y Ortega, y que este intervino otra vez en agosto para realizar algún reajuste. El edil ha defendido siempre que su intervención en este extremo ha sido para marcar los criterios político, no técnicos. Contaron cómo en septiembre se aprobó el pliego -todos los concejales del PP lo apoyaron y fue avalado por la Comunidad, incluido el vicepresidente primero, Ignacio González-, cómo el 2 de noviembre se cerró el plazo para presentar ofertas y ya en esos momentos se habían empezado a recibir presiones. En concreto, recordaron cómo Ricardo Romero de Tejada reconoció que llamó a Narciso de Foxá, entonces concejal de Urbanismo, para decirle que el proceso de adjudicación no debía seguir la línea que llevaba. En una semana de diciembre, debido al cambio de valoración del arquitecto municipal, Pedro Sánchez, las parcelas pasaron de estar virtualmente adjudicadas a Proinsa a estarlo a Afar-4. El fiscal insistió, tanto con Moreno como con Peñas, en si les constaba que Sánchez tuviera vínculo alguno con Afar-4. Ambos contestaron que no, pero le dieron ejemplos, a su entender claro, de cómo se habían realizado determinados procesos e informes que habían terminado por favorecer a esta empresa. Lo que sí dejaron claro es que De Foxá está vinculado a Ignacio Sánchez Junco, antiguo concejal de Urbanismo de Majadahonda en la etapa de Romero de Tejada como alcalde y arquitecto de Afar-4.El vínculo entre Sánchez Junco y De Foxá es la empresa MarbleWorks, de la que ambos son socios. Sin llegar a profundizar, el fiscal, explicó Moreno, pidió que se anotara este hecho. Pero uno de los detalles más significativos es que relacionaron al arquitecto municipal con el actual secretario general del PP de Madrid, Francisco Granados. Recordaron en su declaración en la Fiscalía Anticorrupción que Sánchez ha trabajado mucho en Valdemoro cuando Granados era alcalde de este municipio, y citaron los contactos del secretario general con la empresa Dico. El responsable de esta sociedad es, según Peñas y Moreno, quien le comunicó a Ortega de parte de Granados que abandonara la Alcaldía porque el partido había decidido poner a otra persona. Moreno fue más allá: explicó que el día que debía votarse la investidura de Narciso de Foxá Ortega los llamó para decirles que modificaran la intención de su voto -porque se suponía que iban a votar en contra de su compañero de partido- y que al día siguiente este mismo empresario se pondría en contacto con ellos. Cómo no, el fiscal le ha pedido al concejal Peñas que aclarara sus manifestaciones al respecto de la cantidad que le habría ofrecido De Foxá para poner paz en todo este asunto: un millón de euros, como declaró en la entrevista publicada por M2. Peñas explicó que en una conversación larguísima, durante la que De Foxá garabateaba en un papel, se estaba hablando de dinero -«de que si me iba con ellos iba a ganar mucho más»- cuando le mostró una cifra escrita que él interpretó como un millón de euros. Finalmente, y tras dejar claro que se ha presionado a técnicos municipales para que este polémico concurso se dejara desierto, mostraron su extrañeza por el hecho de que el proceso se vuelva a abrir de forma inmediata cuando hay un proceso judicial en marcha. Se podría dar el caso, dicen, de que se adjudique el suelo a una empresa y dentro de dos años los tribunales resuelvan que el adjudicatario debía ser el que quedó en cabeza tras la primera valoración. |
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